- Hace unos días participó, en el palacio municipal de Morón, de un anuncio importante luego de años de lucha de los trabajadores municipales.- Nuestro sindicato y otros sindicatos y yo, desde la Federación, estuvimos y nos llenó de alegría porque se efectivizaron 600 compañeros, algo que es muy importante. Se reconocen así a los compañeros más antiguos a quienes les van a dar la categoría más alta del escalafón para poder jubilarse. Son cosas muy importantes para nosotros.
- Para que se entienda, en el palacio municipal está el personal de planta y los que tienen contrato a los que muchas veces se les renueva. ¿Había personal con contratos desde hace muchos años?
- Había de 13 años. Pasa en todas partes y esa es la pelea que venimos planteando de los compañeros contratados. Consideramos que tienen que llegar a una cantidad determinada de años y deben quedar efectivos. Y esto no pasaba y por eso nos encontramos con contratados de muchos años. Es un buen paso porque una gran cantidad de compañeros, desde el 1º de septiembre, quedan efectivos. Y el compañero efectivo tiene garantías laborales. No está pensando constantemente en si lo echan. Ahora por ejemplo, puede sacar un crédito.
- Es una seguridad laboral.
- Seguro. No estás pensando en si se te termina el contrato a fin de mes o no dependes del humor del jefe de turno. Esto te da una estabilidad que lo que hace es que ahora trabajen tranquilamente, cobren su salario y traten de profesionalizarse en su trabajo.
- ¿Todos los trabajadores que estaban en esta condición fueron pasados a planta o depende de la antigüedad?
- Se tomaron tres años de antigüedad.
- O sea que el trabajador que tiene uno o dos años de antigüedad no entra.
- Nos parece lo más justo. Por supuesto que sería justo efectivizar a todos. No se puede y entonces se efectivizó a gran parte de los compañeros. Y me parece que la alternativa que se utilizó de consenso entre los gremios y el ejecutivo fue, me parece, la más indicada porque está dentro de la antigüedad de la mayoría de compañeros.
- Venían reclamando esta situación hace mucho. ¿Los tomó por sorpresa el anuncio, fue consensuado o fueron trabajando conjuntamente entre los gremios y el municipio?
- Esto es un trabajo que se venía realizando entre la secretaría de gobierno y los sindicatos, desde que se anunció el aumento salarial que fue un aumento que no conformó a todas las partes. Pero lo más importante fue esta comisión que se formó de paritarias. Y me parece que hoy se ven los frutos de esa negociación y fue de común acuerdo entre los sindicatos y el ejecutivo. Es muy valorable este contexto de diálogo. Estos gestos fortalecen a los trabajadores. Si no hubiera discusión entre los sindicatos y el ejecutivo, siempre se escucha una sola campana y siempre falla algo a la hora de determinadas cuestiones.
- Esta decisión se tomó en Morón pero, ¿qué pasa con el resto de los municipios de la provincia?
- Nuestra solución sería lo que plasmamos desde la FAM, derogar la Ley Atanasoff. Y este es un gran problema porque tenemos una ley en el seno de la provincia que todavía se discute en las comisiones. Tenemos un compromiso de la Cámara de Diputados provincial de que se va a tratar antes de fin de año, pero es una gran pelea que tenemos todos los días. El tema es que hay intendentes que se niegan a este acuerdo. La verdad es que si derogamos esa ley, no podemos volver a tener un trabajador contratado por 13 años, que es un exceso. Nosotros, los trabajadores municipales, necesitamos de una vez por todas paritarias provinciales y nacionales y que podamos derogar esta ley. Y necesitamos discutir esto en los municipios porque también está esto de que necesitamos alternativas de discusión. En Morón estamos detrás de la carrera de Enfermería y de ver si podemos plantear la recuperación del 3%, pero también dependemos de algunas leyes nacionales y provinciales. No todo se le puede pedir al intendente porque hay cosas que estamos trabados en la provincia, como pasa con muchos intendentes. Lo que sí me preocupa es que hay intendentes del conurbano, que tienen una autoridad dentro de la FAM, y que cuando les vamos a reclamar hacen oídos sordos.
- ¿Es casual que este acuerdo se de durante la Gestión Ghi y a su vez con su ausencia al frente del sindicato municipal? Digo, sobre todo, teniendo en cuenta algunos cortocircuitos entre usted y Sabbatella. ¿Nota una apertura mayor por parte de esta gestión hacia el sindicato municipal?
- La apertura empezó antes de que Sabbatella se vaya de Morón. Hay que ser honesto. Empezó con el cambio de algunos funcionarios. Por supuesto que con el actual intendente se estableció, y esto, más allá de si yo estoy o no en el sindicato municipal. Esto me alegra porque beneficia a los trabajadores y de ahí, uno nunca se va a ir sentimentalmente. Me parece muy importante esto más allá de que empezó antes de Lucas, pero él reafirmó esta negociación. También hay que felicitar a los sindicatos. Tenemos que plantear que los salarios son muy bajos y eso cuesta una discusión salarial. Hoy, qué puede discutir un sindicato municipal si no tenemos la ley. Cómo discute un porcentaje de un salario si nuestro salario está en 1.000 pesos y un trabajador privado está arriba de 4.000. Es la diferencia que planteamos por ejemplo entre los compañeros camioneros y nosotros. Siempre los sindicatos municipales pagan el costo de la negociación con los ejecutivos. Y viene bien porque es una forma de que los trabajadores municipales piensen que sus dirigentes empiezan a encontrar un rumbo para poder llegar a una negociación. En este sentido, más allá de poder ayudar, me parece correcto y hoy se está transformando en una realidad, algo que hace mucho venimos peleando.
- ¿Estos aumentos recaerán sobre el contribuyente? ¿Van a aumentar las tasas?
- Comúnmente, las tasas no aumentan en el salario de los trabajadores. Y es una gran discusión. Esto será plata de la recaudación porque también convenimos en que la mayoría de los municipios hoy recaudan más dinero, les llega más coparticipación. Y nosotros nos reacomodamos en esto. Así que al municipio no le va a ocasionar que se salga del presupuesto. En diciembre sí vamos a discutir un salario para el año que viene.
- ¿Piensa volver a conducir el sindicato municipal?
- Me debo a una agrupación y las elecciones son el año que viene. Y la agrupación decidirá. No tengo una decisión tomada pero todo el que me conoce sabe que llevo en mi persona a los trabajadores municipales. Pero la agrupación será la que decida lo mejor para el futuro.
- ¿Qué opina del papelón que hizo la CTA para dirigir autoridades?
- Tengo amigos en la CTA y esto es una gran discusión que se planteaba de otra forma de hacer sindicalismo y terminó en algo que es un retroceso. Me parece que tendrían que haber tenido un lenguaje mucho más cuidadoso porque en definitiva perjudican al militante de base. Esta elección también tiene que tener un replanteo cuando se discute si sirve esta manera o hay que volver a un congreso. Una cosa es el sindicato de base y otra, una elección nacional de toda una central de trabajadores donde se mezclan los sindicatos. Esto termina siendo una elección entre ATE y SUTEBA y no una elección por los intereses de los trabajadores.
